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Galletas masticables de leche condensada azucarada
Una hornada casera de galletas de leche condensada es una delicia única y satisfactoria.
Ingredientes
- 1 taza Mantequilla sin sal, ablandada
- 3⁄4 taza azúcar cristal
- 2 yemas de huevo
- 1 cucharadita extracto de vainilla
- 1 lata Leche condensada azucarada
- 3 tazas Harina común
- 1 cucharadita levadura en polvo
- 1⁄4 cucharadita sal
- Azúcar granulada extra para espolvorear (opcional)
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Procedimiento
Empieza precalentando el horno a 180°C (350°F). Este es un paso esencial, ya que un horno calentado con precisión garantiza que las galletas se horneen uniformemente.
En un bol grande, mezcla la mantequilla blanda y el azúcar con una batidora eléctrica. Es importante mezclar hasta que la mezcla esté ligera y esponjosa, normalmente entre 3 y 5 minutos. Este proceso garantiza una masa de galletas maravillosamente suave.
Incorpore poco a poco las yemas de huevo, de una en una, seguidas del extracto de vainilla y la lata de leche condensada. Asegúrese de raspar las paredes del bol para que todo quede bien mezclado y las galletas adquieran un sabor y una textura homogéneos.
En otro bol, batir la harina, la levadura en polvo y la sal. Incorporar poco a poco estos ingredientes secos a la mezcla húmeda. He comprobado que añadirlos por tandas evita que la masa quede demasiado seca o harinosa.
Una vez que la masa esté mezclada de manera uniforme, vierta cucharadas redondas en las bandejas preparadas. Como consejo experto, asegúrate de dejar suficiente espacio entre las galletas, ya que se extienden.
Para darle el toque final, puede espolvorear cada galleta con un poco de azúcar granulado, lo que le dará un agradable toque crujiente.
Hornear durante 12-15 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados. Un consejo útil es girar las bandejas a mitad de horneado para que se doren por igual.
Deje que las galletas se enfríen en las bandejas durante 5 minutos antes de transferirlas a rejillas metálicas para que se enfríen completamente. Recuerde que las galletas siguen cociéndose en la bandeja caliente, así que no se arriesgue a que se sequen si las deja demasiado tiempo.