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Sopa de maíz caliente
Una de mis recetas favoritas es esta calentita sopa de maíz. No sólo es increíblemente deliciosa, sino también muy fácil de hacer. Suelo preparar esta sopa para mi familia y a mis hijos les encanta, sobre todo en los meses más fríos, cuando apetece tomar una sopa calentita. Los ingredientes frescos son especialmente importantes para el sabor de la sopa.
Ingredientes
- 500 g Granos de maíz frescos o congelados
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 l Caldo de pollo o verduras
- 2 Tablespoon aceite de oliva
- Sal, pimienta
- Una cucharada de nata para servir (opcional)
- Hierbas frescas (perejil o cebollino) para decorar
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Procedimiento
Para la receta de sopa de maíz, primero pela y pica finamente la cebolla y el ajo. Si te gusta un poco picante, como a mí, también puedes añadir un trocito de guindilla roja.
Calentar el aceite de oliva en una olla grande y rehogar la cebolla, el ajo y, si es posible, la guindilla. Yo siempre lo hago a fuego medio para que las cebollas empiecen a caramelizarse de verdad y den después a la sopa un agradable dulzor.
Añadir el maíz y freír brevemente. He hecho esta receta tanto con maíz fresco como congelado, ambos funcionan muy bien siempre y cuando el maíz esté bien escurrido.
Añadir el caldo de pollo o de verduras y llevar a ebullición. Yo prefiero el caldo de pollo porque hace la sopa más rica, pero el caldo de verduras es una opción vegetariana estupenda.
Cocer la sopa a fuego lento durante unos 20 minutos. Sabrás que está lista cuando el maíz se haya ablandado.
Triturar la sopa de maíz con una batidora de mano o en una licuadora hasta que la sopa esté cremosa. Ahora debería tener un bonito color amarillo y una consistencia cremosa.
Sazonar con sal y pimienta y añadir más caldo si es necesario si la sopa está demasiado espesa.
Vierte la sopa de maíz en cuencos, adorna con una cucharada de nata y hierbas frescas picadas y sirve caliente. ¡Que aproveche!